¡Final del Mundial de Fútbol de la FIFA de Sudáfrica 2010!

Estamos retransmitiendo los momentos finales del partido. La final entre Hong Kong y Camboya ha acabado 0-0, en un partido con muchas ocasiones y buen juego. Sigue habiendo polémico arbitraje a favor de Hong Kong, y acaba de finalizar la prorroga. Así que comienza la tanda de penaltis.

Camboya será la primera en lanzar el penalti. ¡Acierta! 1-0
Turno de Hong Kong. ¡Gol! 1-1
Camboya tira, ¡y no falla su penalti! 2-1
Hong Kong empata en el marcador. 2-2
Camboya se pone por delante de nuevo. 3-2
Hong Kong no falla su penalti. 3-3
Camboya marca el cuarto. 4-3
Hong Kong no se da por rendida. 4-4
Turno de Camboya y... ¡gol! 5-4
Hong Kong no debe fallar si quiere seguir y... ¡gol también! 5-5

El árbitro ordena a iniciar otra tanda de penaltis, pero antes de eso...

¡El mismisimo Dios hace acto de presencia! ¿Pero esto qué es? Dios ordena que el partido sea ahora un partido a tres bandas entre Hong Kong, Camboya y... ¿¿¡¡C. Vaticano!!?? ¡En un partido a gol de oro, el que marque gana! ¡Increíble!

Se reanuda el partido a tres bandas. ¡Esto es un caos! Hong Kong sigue con el arbitraje a su favor. A Dios no le gusta eso, ¡y manda a los jugadores de la selección de Hong Kong al infierno con Satanás!

Camboya está ahora jugando muy bien, pero están más cansados que sus rivales. Los jugadores de C. Vaticano se esfuerzan también.

El partido en un momento dado parece dominado totalmente por Camboya, y por poco no marca en varias ocasiones. Entonces, Dios, señala con un dedo a los jugadores de Camboya, ¡y les lanza un rayo! Ahora, ¡todos los jugadores de Camboya se han convertido al cristianismo! Esto lo aprovecha C. Vaticano para marcar el gol, ¡¡¡y se convierten en los campeones del Mundial de Sudáfrica 2010!!! ¡Esto no se lo esperaba ni Dios! Oh, wait...

Hasta aquí la retransmisión del partido. Tras esta apoteosica e histórica final, ¡damos por finalizada las noticias en la página oficial! ¡Hasta el próximo Mundial 2014!

Un saludo.